Virgen del Canciller Rolin (Jan van Eyck)

•May 29, 2008 • 2 comentarios


Autor: Jan Van Eyck
Fecha: 1435
Museo: Museo Nacional del Louvre
Características: 66 x 62 cm.
Material: Oleo sobre tabla
Estilo: Pintura Flamenca

Se conoce esta obra por dos nombres: la Virgen de Autun, porque estaba en la catedral de Autun, y la Virgen del Canciller Rolin, porque éste es el personaje que aparece rezando ante María. Rolin era natural de Autun y se piensa que encargó la obra para donarla a la catedral de su ciudad, igual que hizo cuando fundó el hospital de Beaune y pidió a Rogier van der Weyden el políptico del Juicio Final. El canciller Rolin fue el personaje más importante, sin duda, de la Corte de Borgoña. Diplomático, político, intrigante, era de cuna baja; ascendió durante su vida hasta ser nombrado canciller, que en aquel momento era un cargo difuso, casi de servidor de cámara, y lo convirtió en una especie de primer ministro, de hombre fuerte que sustituyó en sus funciones al propio Duque. Su poder fue tremendo así como su riqueza, aunque su fama era pésima y se le atribuían todo tipo de iniquidades e inmoralidad. El fruto de esta fama personal es esta Virgen, que todavía hoy no se sabe si era un monumento más a su orgullo o un intento de borrar su mala fama con una obra piadosa. Rolin está retratado por Van Eyck nada menos que de igual a igual con la propia Virgen María. Ni siquiera están en una iglesia, sino en una loggia de un castillo, abierto a un maravilloso paisaje. Decimos que el canciller está rezando ante María, pero nada indica su fervor religioso, excepto que se encuentra arrodillado. Su mirada es la de una profunda satisfacción de sí mismo, y fija los ojos en el Niño, casi desafiante. Esta igualdad, esta cercanía promiscua con las figuras divinas, eran escandalosas para la época, y resulta obvio que el canciller se está haciendo un monumento a sí mismo, más que rindiendo homenaje a la Virgen. Por otro lado, el tipo de la Virgen es propio de Van Eyck, con un ángel coronándola, mostrando al Niño en la actitud de María = trono de Dios. En los capiteles de las columnas podemos reconocer diversas escenas del Antiguo Testamento: Adán y Eva expulsados del Paraíso, Caín y Abel, la Borrachera de Noé. Respecto al hermoso paisaje del fondo, algunos han reconocido ciertos edificios, creyendo que se trataba de la ciudad de Brujas, Lieja, Utrecht, Lyon, Maastricht, Génova… No es ninguna de ellas y son todas a la vez. Van Eyck visitó todos estos lugares en misiones secretas para el duque Felipe el Bueno y realiza la ciudad ideal a partir de sus recuerdos de todas ellas.

web.quattrocento@gmail.com

Vista de la ciudad ideal (Piero della Francesca)

•May 29, 2008 • 1 comentario
Autor: Piero della Francesca
Fecha: 1475 h.
Museo: Galería Nacional de las Marcas
Características: 60 x 200 cm.
Material: Témpera sobre madera
Estilo: Renacimiento Italiano

Los especialistas no llegan a un acuerdo sobre la autoría de esta soberbia composición protagonizada por la perspectiva, fundamental en la pintura del Quattrocento. Al interesarse Piero della Francesca tanto en este aspecto y existir cierta similitud con las arquitecturas que encontramos en la Flagelación, bien podría ser el maestro de Sansepolcro su autor. En el centro de la tabla, un edificio de planta circular con dos alturas decoradas con medias columnas; a ambos lados se sitúan diversos edificios dotados de un soberbio efecto de profundidad, cerrando la composición nuevas arquitecturas que nos proporcionan el punto de fuga. Las baldosas policromadas del suelo sirven para acentuar la profundidad mientras que los dos podios sobre escalones que encontramos en el primer plano refuerzan el aspecto de simetría general de la composición. La iluminación aplicada a los edificios es sensacional, dotando de un juego de luz y sombra a la composición que eleva las posibilidades de que Piero sea el creador de esta maravillosa obra.

web.quattrocento@gmail.com